La endodoncia se utiliza para tratar infecciones o daños en la pulpa dental (el tejido blando del interior del diente). Este tratamiento es clave para salvar dientes, evitar su extracción y conservar la salud bucal.
¿En qué consiste?
- Apertura del diente afectado para acceder a la pulpa.
- Eliminación del tejido dañado e infección de los conductos radiculares.
- Sellado de los conductos con material biocompatible para evitar nuevas infecciones.
- Finalmente se coloca de una corona, para proteger el diente.